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Denunciados dos vecinos del Valle de Aezkoa por capturar furtivamente 1.560 ejemplares de rana bermeja
jueves, 18 de marzo de 2004La Sección de Protección Ecológica de la Policía Foral ha denunciado a dos vecinos del Valle de Aezkoa por capturar furtivamente 1.560 ranas bermejas. Los agentes de la Sección Ecológica sorprendieron en la noche del pasado lunes, 15 de marzo, en las balsas de la zona de Aribe a los dos vecinos denunciados con un millar de ranas bermejas, que nuevamente volvieron a ser sorprendidos en la noche de ayer, miércoles 17 de marzo, en las inmediaciones del pantano de Irabia con 560 ejemplares.
Los pescadores furtivos han sido denunciados administrativamente y el Departamento de Medio Ambiente incoará contra ellos un expediente sancionador por la comisión de dos faltas graves contempladas en la Ley Foral de Protección y Gestión de la Fauna Silvestre y sus Hábitats: capturar especies de interés especial (multa de 6.000 a 60.000 euros), con la circunstancia agravante de hacerlo de noche y utilizando luz artificial.
Los hechos que motivaron la intervención policial se encuadran dentro de la vigilancia específica de balsas que se está realizando la Sección de Protección Ecológica por la noche, ya que en la época de desove en la que nos encontramos se multiplican las prácticas furtivas. En este caso, los agentes se desplazaron en la noche del lunes a las balsas de la zona de Aribe, donde en labores de prevención observaron un vehículo todo terreno que levantó sus sospechas. Al procederse a su registro descubrieron escondido un saco de malla en el que se transportaban las mil ranas. También fueron decomisadas dos linternas frontales y dos trajes de neopreno utilizados para introducirse en las balsas.
Los agentes subrayaron la poca colaboración de los pescadores, que se negaron a manifestar el lugar exacto en el que fueron capturadas. Este hecho tiene su importancia por la idoneidad de devolver a las ranas a su lugar de origen para facilitar su reinserción en el medio natural. Por lo tanto, las ranas fueron devueltas al medio en diferentes balsas de la zona, a excepción de nueve ejemplares muertos, que fueron entregados a un centro benéfico.
Los agentes de la Sección de Protección Ecológica de la Policía Foral sospecharon que estas personas volverían a la captura de ranas bermejas, por lo que establecieron otro dispositivo de vigilancia en la noche de ayer miércoles. Esta vez se centraron en las inmediaciones del pantano de Irabia y volvieron a sorprender a los pescadores denunciados en lunes, esta vez, acompañados de otras tres personas de la zona. Transportaban 560 ranas bermejas que fueron devueltas a su medio natural.
En esta ocasión, los furtivos portaban radiotransmisores para facilitar sus movimientos, además de linternas y trajes de agua. También las artes de captura fueron decomisadas y serán remitidas al Departamento de Medio Ambiente.
Inspecciones en comercios y restaurantes.
Los agentes continúan con las inspecciones de establecimientos hosteleros, recordando que está prohibida su venta con uso gastronómico. En estos dos casos citados los agentes de la sección ecológica sospechan que el gran número de ranas intervenidas, 83 docenas en la primera ocasión, no son para consumo propio, sino para comercio ilegal.
En este sentido, la Policía Foral recuerda que está expresamente prohibida la venta y comercio de rana bermeja, por lo que continuarán las inspecciones en bares, restaurantes y comercios susceptibles de trabajar con esta especie catalogada de interés, por lo que tiene un grado de protección por su valor medioambiental.
Cabe recordar que el pasado año fueron inspeccionados trece establecimientos, de los que cuatro fueron sancionados por el Departamento de Medio Ambiente por poseer para la venta 820, 240, 194 y 120 ancas de rana bermeja, respectivamente, y tras denuncias administrativas formuladas por agentes de la Policía Foral.
