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La Policía Foral alerta sobre el aumento de mordeduras de perros en verano
viernes, 30 de julio de 2004Agentes de la sección de protección ecológica de la Policía Foral han realizado esta pasada semana diligencias en dos casos de mordeduras de perro a personas: la primera ocurría en Tajonar, donde una vecina de Burlada sufría heridas por mordedura de un mastín en la mano; y la segunda en Elorz, con una pamplonesa también mordida en la pierna por un perro pastor suelto.
Según indica la Policía Foral, estos casos de mordeduras aumentan durante el verano principalmente debido a los perros que se encuentran sueltos en pueblos donde aumenta la presencia de visitantes de vacaciones. Las denuncias de ciudadanos que han sufrido mordeduras suelen requerir la presencia policial para abrir el correspondiente atestado, que en función de las circunstancias se tramita por vía penal o administrativa. Tanto en un caso como en otro puede reclamarse la correspondiente responsabilidad civil por los daños y perjuicios ocasionados.
Normativa aplicable
Por ello, y ante el importante incremento de incidentes protagonizados por perros contra personas y contra otros animales (otros perros, ganado…) , se recuerdan las normas que deben regir para los dueños de perros y el protocolo a seguir en caso de sufrir ataque con posterior lesión.
La Ley Foral 7/94 de Protección de los Animales obliga al poseedor del mismo a adoptar las medidas necesarias para que no cause daño o molestias a terceras personas con carácter general. Además, en espacios públicos urbanos, los perros deben ser conducidos mediante correa o cadena. Así, un perro suelto puede acarrear una sanción de entre 60 y 150 euros por la comisión de una infracción leve. Asimismo se recuerda la obligatoriedad de identificación de todos los perros a partir de los cuatro meses de edad así como su vacunación antirrábica.
Muchas localidades navarras ya han aprobado ordenanzas reguladoras sobre la tenencia de animales en sus términos municipales, detallándose minuciosamente los requisitos sobre la posesión de los mismos.
Más exigencias impone la Ley 50/99 sobre Régimen Jurídico de la Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos, de carácter estatal, que obliga a poseer y portar licencia específica para los titulares de determinadas razas de perros peligrosos: Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, Dogo Argentino, Tosa Inu, Rottweiler, Fila Brasileiro, Akita Inu y American Staffodshire Terrier. Esta ley obliga a los dueños a llevar al animal permanentemente atado y con bozal, incurriendo en falta grave quien deje suelto al perro o sin bozal en lugar público recogiendo sanciones por este hecho entre 301 y 2.400 euros. Conviene recordar que la normativa estatal establece que “también serán considerados perros potencialmente peligrosos aquellos animales que hayan protagonizado agresiones a personas o a otros animales.”
Protocolo de actuación
Los agentes de la Policía Foral están extremando la vigilancia en el cumplimiento de estas normativas y además actúan en caso de denuncias, comprobando en estos casos si ha existido dolo, imprudencia, negligencia y los daños o lesiones ocasionados, para derivar el incidente bien por la vía penal o administrativa a la hora de realizar las correspondientes diligencias. Además se recaba la colaboración del Instituto de Salud Pública, quien al recibir la comunicación del incidente realiza a través de los servicios veterinarios un seguimiento durante catorce días del animal, que permanecerá en “cuarentena”.
En cualquier caso, cuando una persona sufre una mordedura, debe denunciar el hecho ante cualquier cuerpo policial, en el caso de la Policía Foral, a través del número de urgencias 112. Es importante asimismo que adjunte a las diligencias un parte médico que certifique las lesiones producidas y aporten el máximo número de indicaciones que permitan identificar al perro o a su titular.
Desde Policía Foral se solicita a los dueños de perros, la tenencia de los mismos con la máxima responsabilidad posible, observándose un cumplimiento estricto de la normativa vigente para prevenir posibles incidentes o molestias con los mismos.
