(ir al contenido)

Logotipo navarra.es

Castellano | Euskara | Français | English

Herramientas para el contenido

Compártelo

  • Meneame
  • Delicious
  • Twitter
  • Google
  • Facebook

Ver más noticias de este día

Entra en servicio el nuevo puente en la carretera Tudela-Ejea de los Caballeros, que sustituye al destruido por las lluvias torrenciales de septiembre

martes, 21 de diciembre de 2004

El consejero de Obras Públicas, Transportes y Comunicaciones, Álvaro Miranda Simavilla, ha asistido esta mañana a la puesta en servicio de un nuevo puente en la carretera Tudela-Ejea de los Caballeros (NA-125), que sustituye al que resultó destruido durante las lluvias torrenciales registradas el pasado mes de septiembre. Las obras han tenido un coste de 519.758 euros.


Como se recordará, la infraestructura y un tramo de la carretera resultaron gravemente dañados el pasado 7 de septiembre, a consecuencia de la fuerza torrencial de las aguas del barranco San Gregorio.


Cuatro días después se abría un desvío provisional que ha permitido el paso por esta carretera, mientras han durado los trabajos de diseño y ejecución de la solución definitiva. Para el desvío, se acondicionó un tramo de 300 metros de longitud con una obra de fábrica constituida por un marco de 15 metros de longitud y una sección de 2,50 x 2 metros, además de restituirse parcialmente el cauce del barranco en las proximidades del desvío.


La nueva infraestructura


La actuación definitiva ha consistido en la construcción de un puente con un único vano, con una luz de 25 metros, constituido por un tablero de hormigón armado apoyado en 6 vigas de 1 metro de canto. Los estribos son de hormigón armado cimentados en zapatas corridas, también de hormigón armado. La sección transversal del tablero es de 10,80 metros


Igualmente, se han reconstruido 386 metros de carretera que coinciden en planta con el trazado anterior, modificándose ligeramente su alzado para dar mayor capacidad de desagüe a la estructura. La sección de la carretera consta de dos carriles de 3,50 m. y arcenes de 1 metro.


Como actuaciones especiales, además de la señalización y balizamiento, se incluye la demolición del desvío actual y la restitución y protección del cauce del barranco de San Gregorio.


Dada la necesidad de dar al cauce la sección máxima de desagüe antes del inicio de la época invernal, se ha llevado a cabo un plan de trabajo que ha permitido realizar toda la obra en dos meses. Las obras han sido ejecutadas por Arian, con un coste de 519.758 euros.


Actuaciones en otras carreteras dañadas


Además de la NA-125, otras doce carreteras de la zona de la Ribera se vieron afectadas de forma significativa por las lluvias del 7 de septiembre. Su reparación (incluida la de la carretera Tudela-Ejea) tiene un coste global de 2.850.000 euros, de los que ya se han ejecutado trabajos por importe de 2.064.048 euros.


Las carreteras afectadas fueron las siguientes: N-232 (Alfaro-Tudela-Zaragoza); N-121 (Pamplona-Tudela); NA-134 (Eje del Ebro); NA-126 (Tudela Tauste); NA-125 (Tudela-Ejea); NA-5200 (Ribaforada-Cortes); NA-5222, (Accesos Cortes); NA-5221 (Cortes-Novillas); NA-5210 (Buñuel Estación); NA-5211 (Buñuel – Accesos Puente); NA-5281 (El Bocal), y NA-3042 (Ablitas – Ribaforada).


Los daños más comunes fueron las inundaciones, corrimientos de tierras, desprendimientos, hundimientos y aterramientos de obras de fábrica.


El plan de reparación diseñado ha incluido tres tipos de actuaciones: trabajos de acción inmediata, obras de reparación, y obras de consolidación y refuerzo de la calzada.


El primer tipo de actuación comprende las labores realizadas tras las lluvias, con el objetivo de poner en servicio lo más rápidamente posible las carreteras. Para ello, se llevaron a cabo labores de limpieza de la calzada y puntualmente, se repusieron algunos sistemas de drenaje longitudinal (cunetas) y transversal (obras de fábrica), así como tramos de pavimento, barreras, arcenes, señalización vertical y balizamiento.


Por su parte, las actuaciones de reparación han consistido en la limpieza con detalle de los sistemas de drenaje longitudinal y transversal, reparación de taludes de terraplén y sostenimiento de taludes de desmonte: escolleras, muros, mallas, etc., así como la reconstrucción de estructuras.


El tercer grupo de actuaciones se ha centrado en la consolidación y refuerzo de la calzada para prevenir deterioros irreversibles. Esto obedece al hecho de que algunos de los efectos del agua en las carreteras inundadas se hacen patentes, bruscamente, a medio plazo, ya que al filtrarse y penetrar el agua en las capas granulares se pierden o disminuyen las características de estos materiales, que son imprescindibles para soportar el tráfico, produciéndose roderas, grietas, baches, mordientes o socavones que afectan notablemente a la seguridad y comodidad del trafico. Las carreteras en las que estos trabajos han sido más necesarios, debido, en unos casos, a los periodos de inundación soportados y, en otros, a la fuerza con la que el agua ha actuado sobre ella son la NA-125, Tudela-Ejea; la NA-5200, Ribaforada-Cortes, y la NA-134, Eje del Ebro.


En la actualidad, han terminado las actuaciones del primer y segundo grupos y está previsto que los trabajos de consolidación finalicen antes del 31 de diciembre de 2004, excepto en dos carreteras –la NA-5200 y la NA-125 (km. 0 al 10), en las que, además del refuerzo, se van a realizar obras de acondicionamiento y mejora del trazado de las mismas. Estos trabajos se acometerán en los primeros meses de 2005.


Gobierno de Navarra

Contacte con nosotros | Accesibilidad | Aviso legal | Mapa web