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El Plan Foral de Drogodependencia concienciará a los jóvenes sobre las consecuencias de los consumos de alcohol y drogas en la conducción

viernes, 17 de junio de 2005

La alta participación de los jóvenes en las prácticas de ocio del fin de semana, donde los consumos de alcohol y otras drogas como el cánnabis están presentes en mayor medida en los últimos años, unido a la frecuente utilización de vehículos para los desplazamientos que realizan los jóvenes en ese tiempo, son factores que tienen un peso relevante en los índices de accidentes de tráfico y que justifican la campaña 2005 del Plan Foral de Drogodependencia.


Según los datos de la V Encuesta sobre la juventud navarra (Fundación Bartolomé de Carranza, 2003), el último fin de semana salieron el 75,6% de los jóvenes navarros de 15 a 24 años. De entre los que salieron, los datos referidos al último mes indican que un 49,7% había consumido alcohol, un 20,9% había consumido alcohol y cánnabis, un 13,6% consumieron otras mezclas y el 14,4% no consumió nada. Las medias de alcohol ingeridas durante el fin de semana fueron de 14,4 Ubes (Unidades de bebida) los varones y de 9,4 Ubes las mujeres.


Respecto a otras conductas, el 79,7% de los jóvenes de 15 a 24 años hace uso de un vehículo (ya sea como conductor o como usuario) con una frecuencia diaria o semanal. El principal motivo de desplazamiento es el ocio (el 63,6% del total se desplaza mucho o bastante por este motivo), seguido a distancia de los motivos laborales (32,4%). Por motivos de ocio se desplazan más los jóvenes no residentes en Pamplona (el 77,5% de los de la zona Noroeste, el 72,8% de los de la Ribera y el 71,2% de los de Estella) que los de Pamplona (el 55,8% se desplaza mucho o bastante por ocio). Vinculado a ello, un 26,5% de los jóvenes navarros de 15 a 24 años ha tenido alguna vez un accidente de tráfico, siendo el motivo principal del desplazamiento el ocio en el 62,9% de los casos. El trayecto era muy corto (menos de 10 km) en el 53,2% de los casos y corto (10-50 km) en el 30,7%.

En España, los accidentes de circulación siguen suponiendo una de las cinco primeras causas de muerte en la población general y la primera causa de muerte entre los varones de 15 y 29 años de edad. A la hora de explicar las causas de la siniestralidad, todos los estudios apuntan al factor humano como el elemento que se encuentra implicado entre el 80 y el 90% de los accidentes del tráfico. De entre todos los fallos humanos, hay tres que explican casi el 60% de los accidentes: el alcohol, la velocidad excesiva o inadecuada y las distracciones.


Se estima que el 40% de los fallecimientos por accidentes de tráfico en España están relacionados con el consumo de alcohol. En Europa, del 4 al 14% de conductores fallecidos en accidentes de tráfico presentaban cánnabis en sangre. Y en la mayoría de casos se detectó alcohol junto al cánnabis (Revista Tráfico 166, mayo-junio, 2004).


Por lo demás, todas las drogas afectan a la capacidad para conducir debido a sus efectos sobre el sistema nervioso central (SNC), aunque de forma diferente según sean depresoras de la actividad nerviosa (morfina, heroína, codeína, metadona, hipnóticos y tranquilizantes); estimulantes, que incrementan la actividad nerviosa (anfetaminas, éxtasis, cocaína, etc.); u otras que modifican la actividad nerviosa (derivados del cáñamo, marihuana, hachís, LSD, etc.). Determinados medicamentos pueden resultar igualmente peligrosos a la hora de coger el volante, si bien sus efectos varían en función de la edad, sensibilidad, tolerancia, estado psíquico-físico, circunstancias vitales...


Entre los fallos humanos más importantes causantes de los accidentes se podrían destacar los siguientes: causas físicas como lipotimias, fatiga, defectos sensoriales, sueño, etc; causas psíquicas como falta de atención, agresividad, exhibicionismo, etc.; la búsqueda intencionada del riesgo y de las emociones intensas; las conductas interferentes: charlar, encender la radio, fumar, etc.; la falta de respeto a las normas, de manera voluntaria o por desconocimiento; los estados psicofísicos transitorios por el uso de alcohol, drogas, depresión, estrés, etc.; y la deficiente percepción del riesgo, que es uno de los factores que más influyen en los siniestros.


Por otra parte, no hay que ignorar que la conducción bajo los efectos del alcohol y/o de otras drogas constituyen infracciones que, en función de su gravedad, pueden convertirse en delitos castigados en el Código Penal. En este apartado, y de acuerdo con el informe, un 36% de los jóvenes entrevistados en la campaña “Bebenducir mata” realizada en Navarra en octubre del pasado año desconoce cuál es el nivel de alcohol permitido al volante.


Así pues se resulta evidente la necesidad de promover actitudes de responsabilidad entre los jóvenes ante el consumo de alcohol, cánnabis y otras drogas, en relación con la conducción y los accidentes de tráfico.


La campaña


El material se compone de un folleto titulado “Si vas a salir, ¿cómo vas a volver?”, y un cartel orientados a la idea del lema (se han editado 45.000 folletos en castellano y 10.000 en euskera, además de 1.000 carteles bilingües y 500 más en castellano).


El folleto pretende introducir informaciones e ideas que ayuden a la reflexión y a la toma de decisiones responsables vinculadas con diversos aspectos y situaciones que produce el ocio juvenil de fin de semana. Se ofrecen datos de los consumos de alcohol, cánnabis y otras sustancias y se señalan los riesgos que pueden derivarse de dichos consumos.


También se exponen datos de accidentabilidad relacionada con la conducción, señalando la importancia del denominado factor humano en la misma y la incidencia del consumo de drogas y medicamentos, de la velocidad, las distracciones y la fatiga, principalmente. Se muestra lo que dice la Ley respecto a la conducción bajo los efectos de drogas y se adjunta una tabla para poder calcular la cantidad de alcohol ingerida y poder situarse respecto a las tasas legales de alcoholemia. Por último, se plantean alternativas para evitar riesgos de accidentes en estos desplazamientos. En definitiva, se trata de promover la toma de decisiones responsables, tanto respecto al consumo de alcohol y otras sustancias como en torno a la conducción.


Distribución del Material


Para la distribución del folleto entre los jóvenes se utilizarán diferentes vías. Se tendrá en cuenta especialmente la posibilidad de trabajar los contenidos del material, por lo que se ha cuidado su alcance a diferentes organismos que podrán utilizarlo dentro de sus líneas de trabajo preventivo: asociaciones juveniles, de Madres y Padres y otras que trabajan en Drogodependencias, Centros de Atención Primaria de Salud, Centros de Salud Mental, Programas Municipales de Drogas (Servicios Sociales de Base), etc.


Gobierno de Navarra

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