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Las heladas de los últimos días han afectado al desarrollo de la alcachofa
viernes, 23 de diciembre de 2005Las heladas registradas en los últimos días en la Comunidad Foral han afectado al desarrollo de la alcachofa, según se recoge en el informe semanal sobre la situación del campo, elaborado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, correspondiente a la semana comprendida entre los días 16 al 23 de diciembre.
Desde el punto de vista meteorológico, estos días se han caracterizado por las intensas y repetidas heladas, práctica ausencia de lluvias y el predominio de días despejados. Con carácter general, la totalidad de los termómetros han dado temperaturas bajo cero, alcanzando incluso los -10ºC en Navascués, y siendo muy corrientes las de -3ºC a -7ºC en numerosas localidades tanto del norte como del centro y sur de Navarra.
A partir del lunes día 19, los cultivos hortícolas han soportado fuertes heladas nocturnas que, en las comarcas de la Ribera, se han situado en el entorno de los -5ºC. Como se señala más arriba, el cultivo más afectado ha sido la alcachofa, al quedar completamente helados los capítulos que estaban para o próximos a recolectar, además de los que estaban en desarrollo en el tallo. A primera vista han resistido las heladas los capítulos muy protegidos por las hojas del centro de la roseta de brotes jóvenes (estadios A y B), por lo que la alcachofa de Navarra desaparece del mercado en unas fechas importantes para su comercialización y hasta que las condiciones climatológicas sean favorables.
La ausencia de viento y subida de la temperatura (hasta los 8-10ºC) en las horas centrales del día ha permitido recolectar la ya corta gama de hortícolas que van quedando de aire libre, principalmente cardo y brassicas para la industria y mercado fresco, que gozan de buena demanda en estas fechas. También en invernadero frío las temperaturas son muy bajas a la noche, por lo que hay que vigilar su manejo con riegos y ventilación. Su principal producto, la lechuga, tiene ahora una aceptable cotización y demanda. Se está produciendo riegos de aspersión y pie en los citados cultivos de aire libre para que, ante la ausencia de lluvias, recuperen la humedad que pierden para defenderse de las bajas temperaturas, y evitar así la formación de cristales en la célula. También se están dando riegos de invierno en viña y olivos en aquellos regadíos eventuales de la margen derecha del Ebro, y las pocas horas con las temperaturas más benignas y se aprovechan para seguir con las podas en viñas, frutales, olivos ya recolectados.
Las heladas hacen bajar la humedad del grano en el maíz y endurecen el suelo facilitando su recolección, que ha tenido un fuerte impulso estos días y está casi terminada en las zonas más al sur. En Ribera Baja, igualmente, la campaña de aceituna está finalizada con producciones, en general, algo más bajas que la pasada, continúa recibiendo producto el trujal de Arróniz donde la molturación será notablemente más baja (menos del 50%) que el año pasado.
Cultivos cerealistas
En lo que a cultivos cerealistas se refiere, continúa el aporte pausado de herbicidas (Isoproturones principalmente) en gran parte de la zona de Pirineos, Cuenca de Pamplona, Tierra Estella y Zona Media, si bien las condiciones, ausencia de humedad y fuertes heladas no son las idóneas. En parte, esta aplicación está favorecida por las heladas que limita el daño por rodadas, pero por el contrario, estas bajas temperaturas provocan a su vez problemas de obturación de las boquillas con las consecuentes limitaciones de la eficiencia en la aplicación. A su vez en estas mismas zonas, aunque todavía se da prioridad a los herbicidas, se procede al abonado nitrogenado en sus diferentes prestaciones (urea, urea más azufre y sulfato amónico) en las primeras siembras, si bien este aporte no se hará masivo hasta enero.
En otros cultivos, hasta el momento las habas caballares y colza están aguantando bastante bien las fuertes heladas, ya que a diferencia del año pasado, han alcanzado fenologías propias para ello. En cuanto a siembras, la ausencia de lluvias permite alcanzar buenos temperos en aquellas tierras fuertes donde todavía no se han completado dichas sementeras (Lerga o norte de Tierra Estella) en las que se procede a la siembra de cebada de ciclo corto. A su vez, sigue la siembra de trigos en regadíos de la Ribera, una vez recolectado el maíz, y se retocan parcelas en general donde haya habido algún problema de nascencia por diferentes motivos. En la Cuenca de Pamplona y en menor medida Navarra Media continúan las siembras de guisante proteaginoso.
Por último, cabe indicar que se generaliza la presencia de útiles de poda en viñedo, que continúa la selección de patata para siembra en la zona de Pirineos y aprovechando la ausencia de precipitaciones y las fuertes heladas, se intensifica la extracción y aplicación en campo de estiércol y purines con escasos daños de rodadas y sin riesgo de escorrentías.
