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La depuradora de Valdega dará servicio a Ancín, Legaria, Abaigar, Mendilibarri y Murieta
miércoles, 08 de marzo de 2006El consejero de Administración Local, Alberto Catalán Higueras, ha presentado esta mañana en Murieta el proyecto de la nueva estación depuradora de Valdega, que se construirá en este término municipal para depurar las aguas de Ancín, Legaria, Abaigar, Mendilibarri y Murieta.
Por el momento, la planta atenderá en 2007 las necesidades de estos cinco núcleos cuyas poblaciones no alcanzan los 300 habitantes, si bien se ha previsto estudiar en una segunda fase la inclusión de Oco, Olejua y Etayo. De este modo, la infraestructura podría atender las necesidades de depuración de ocho localidades y dar servicio a un total de 1.000 vecinos.
De acuerdo con el consejero Catalán, "Navarra ha sido la única comunidad en España que consiguió en 2005 depurar las aguas residuales de las localidades de más de 2.000 habitantes equivalentes, tal y como establece la Directiva Europea, y ahora va a centrarse en las localidades con menor densidad de población, en un modelo de desarrollo equilibrado y sostenible, sumamente respetuoso con el medio rural. Ancín, Legaria, Abaigar, Mendilibarri y Murieta suman aproximadamente 700 habitantes; la cifra demuestra el interés del Gobierno de Navarra por atender y dotar de infraestructuras a todos los núcleos urbanos, independientemente de su tamaño".
Con la construcción de esta planta depuradora mejorará la calidad del agua del Río Ega y, en consecuencia, también su ecosistema natural.
Se prevé que la licitación de las obras tenga lugar a finales de este año y que la planta pueda estar en funcionamiento para finales de verano y comienzos de otoño de 2007. La inversión total del proyecto asciende a 2,08 millones de euros, que serán financiados en un 80% por el Departamento de Administración Local, a través del Fondo de Haciendas Locales, y en un 20% con cargo al canon de saneamiento que gestiona NILSA.
Esta estación depuradora se caracterizará por su tecnología de depuración y por la especial importancia que dará a la eliminación de nutrientes. "Reducir al máximo los nutrientes del agua residual (fósforo, nitrato, etc.) supone buscar la calidad óptima en el caudal que vuelve al río. Dicha reducción produce también un descenso de la eutrofización, proceso que lleva a las algas a alimentarse de estos nutrientes, provocado su excesivo crecimiento en el río. Cuando esto ocurre, las algas pueden llegar a absorber el oxígeno necesario para que otras especies, como los peces, puedan vivir", ha explicado Sola al informar de los detalles del proyecto.
Por otra parte, el lecho móvil aumenta la capacidad de tratamiento del agua residual en espacios reducidos, como el de la parcela asignada al proyecto. La tecnología de lecho móvil fue utilizada por primera vez en Navarra en la planta de Tafalla/Olite en 1999, en la que se instaló una planta piloto procedente de Noruega con la que NILSA realizó pruebas durante seis meses. Esta tecnología consiste en piezas pequeñas de plástico que se introducen como relleno en los tanques por los que pasa el agua residual. La materia orgánica se adhiere a ellas y las bacterias que se forman en estas piezas se encargan de digerir esta materia y, por tanto, de reducir la contaminación. Actualmente, Navarra cuenta con lecho móvil en las depuradoras de Tafalla/Olite, Santesteban, Irurzun, Isaba, Lecumberri, Olazagutía y Lodosa.
Por su parte, la instalación de un filtro de arena asegura que ningún vertido, incluso en episodios de fuertes lluvias, llegue al río sin haber sido tratado. Este filtro, por el que pasará el agua residual al final del recorrido de depuración, está instalado en plantas como la de Roncal y es máxima garantía de que cualquier caudal que llegue a la planta será retenido y tratado antes de alcanzar el Ega.
La ubicación de la planta dio lugar el pasado año a diferentes negociaciones con los representantes municipales de Murieta y Abaigar, que finalmente culminaron en un acuerdo rubricado el pasado noviembre.
Durante la presentación, Catalán ha estado acompañado por el director General de Administración Local, Ángel Serrano; el presidente y el gerente de la Mancomunidad de Montejurra, Antonio Barbarin y Laureano Martínez, respectivamente; el gerente de NILSA, Andrés Sola; y el director de proyectos de la institución, Gregorio Berrozpe. En representación de las entidades locales, se encontraban el alcalde de Murieta, Jesús María Martínez de Morentín, y el alcalde de Abaigar, Jesús Guinea; el alcalde de Ancín, Javier Ibáñez; el alcalde de Legaria, Luis María Landa; la alcaldesa de Oco, Lidia Arbizu; el alcalde de Olejua, Santiago Crespo; y el alcalde de Etayo, Juan Miguel Salinas.
