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El Angel de Aralar ha sido recibido por el Gobierno en el Palacio de Navarra
miércoles, 26 de abril de 2006La efigie de San Miguel de Excelsis ha sido recibida por el Gobierno, encabezado por su Presidente -Miguel Sanz Sesma- en el Palacio de Navarra, en cuya capilla ha sido oficiada la tradicional misa por el Párroco de San Nicolás, Santiago Cañardo. Durante la visita de dicha imagen, que se realiza también en parroquias, colegios y otras entidades, se ha mantenido el solemne ceremonial que se viene observando con este motivo.
El Angel de Aralar en su desfile por el Palacio de Navarra.
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La efigie de San Miguel ha llegado a las once de la mañana de hoy a la puerta principal del Palacio de Navarra, portada por el capellán auxiliar del santuario de Aralar, Jesús María Sotil González. En este lugar esperaban el Presidente Sanz, los miembros de su Gobierno así como unas 250 personas. Tras el recibimiento se ha realizado un desfile profesional con el acompañamiento propio de los actos solemnes, consistente en rey de armas, maceros y alguacilillos portacirios. La comitiva ha recorrido los pasillos de la planta noble y el Salón del Trono, hasta llegar a la capilla. En este trayecto ha portado la efigie el Párroco de San Nicolás, quien ha celebrado la Eucaristía en la capilla.
Durante su homilía, Santiago Cañardo, ha dicho que se viven unos momentos delicados que no sólo son objeto de debate en el seno de la clase política sino que preocupan a la Iglesia porque implican una intransigencia laicista ajena a la tolerancia.
Un momento de la Eucaristía celebrada en la Capilla del Palacio de Navarra.
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Igualmente ha señalado que la actuación política debe estar marcada por la búsqueda del bien común y de la protección de la persona, lo que lleva consigo respetarla en todas las fases de la vida, así como defender a la familia -“el mayor valor de la sociedad”- y el derecho de los padres a educar a sus hijos dentro de un marco de igualdad de oportunidades.
“El bien de la persona y del bien común –ha añadido- obliga también a acordarse de los pobres, los ancianos, los enfermos, los inmigrantes, así como a trabajar para que nuestro desarrollo llegue a los lugares de la tierra donde se pasa necesidad”.
Veneración de la reliquia
Al término de la Misa, los asistentes han venerado la reliquia del “lignum crucis” que porta la imagen de San Miguel y han acompañado su traslado procesional hasta la puerta del Palacio, donde se ha realizado, como acto final, la bendición a los asistentes y al conjunto de Navarra.
La parte musical de la ceremonia ha estado a cargo de la Capilla de Música -de la Catedral de Pamplona y de la Orquesta de Cámara, dirigidas por el maestro Aurelio Sagaseta Aríztegui. Tras interpretar las tradicionales “Marcha para la entrada del Reyno” y las letanías populares de San Miguel, el programa musical se ha ejecutado con la interpretación de “Coro de la Cantata 142” en el Ofertorio, “Seu nara kana” o Sanctus (tomado de la misa compuesta para la inauguración de la nueva iglesia de San Francisco Javier de Yamaguchi (1998), “Garioraya no kaze kauru” o Bienaventuranzas (canción popular japonesa) y Cantique (de G. Fauré) en la Comunión.
Las tradicionales coplas en vascuence “Mikel, Mikel guria” y “Agur Mikel Aingeru” han completado la parte musical de la misa. A todo ello hay que añadir que a la llegada y salida del Palacio de Navarra, la Banda de Trompetas y Timbales del Gobierno de Navarra, dirigida por el profesor mariano Morán, ha interpretado el Himno de Navarra.
