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La Policía Foral impide una acampada ilegal de 60 caravanas en Alsasua
martes, 01 de agosto de 2006Agentes de la División de Protección del Medio Ambiente de la Policía Foral desalojaron el pasado jueves una acampada ilegal en Alsasua que estaba compuesta por más de 60 caravanas y 200 personas de etnia gitana provenientes de diversos países de Europa.
La actuación, realizada de manera conjunta con Policía Municipal de Alsasua, se llevó a cabo una vez comprobado que el asentamiento temporal instalado en el paraje Sorozarreta, muy cercano al punto kilométrico 400 de la A-1, no cumplía los requisitos de contar con el permiso del ayuntamiento de la localidad, ni del propietario del terreno ni encontrarse en una zona especialmente habilitada para la acampada.
Los agentes ofrecieron a los acampados un plazo de 24 horas para que abandonasen la zona y dejaran ésta en perfectas condiciones de salubridad.
Cabe recordar que este tipo de problemática es habitual en la época estival, ya que el pasado año se suscitó la misma circunstancia en la zona de Oricáin con la llegada de numerosas autocaravanas de gran capacidad que ocuparon la zona anexa al cauce del río.
Denunciado un vecino de Corella por maltrato a un animal
El Juzgado de Instrucción nº2 de Tudela ha recibido recientemente de la Policía Foral un atestado instruido contra un vecino de Corella de 47 años de edad a quien se le imputa un delito de maltrato de un perro al que dejó abandonando en el interior de un vehículo durante casi dos días de fuerte calor provocando su muerte.
Los hechos que han desembocado en diligencias judiciales tuvieron lugar en la primera quincena del mes de julio cuando una patrulla de la División de Tráfico de la Policía Foral inmovilizó en Castejón a un vehículo Hyundai Coupé, cuyo conductor ofreció positivo en la prueba de etilometría.
En el momento de la inmovilización el conductor viajaba junto a un perro de raza braco, al que dejó en el interior del vehículo a pesar de las indicaciones de los agentes para que no le abandonara debido al intenso calor reinante en la zona. A las 24 horas la patrulla de tráfico pasó nuevamente por el lugar para comprobar que no se había quebrantado la inmovilización y se encontraron con el animal muerto en los asientos traseros del turismo.
A partir de ese momento, agentes de la División de Protección de Medio Ambiente fueron los encargados de realizar el atestado policial en el que ponían los hechos en comunicación del Juzgado de Instrucción de Tudela, siguiendo lo establecido en la Ley de Protección Animal 7/94.
