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La Policía Foral denuncia a un establecimiento de Burlada por dispensar alcohol a un menor
viernes, 10 de noviembre de 2006En octubre se han realizado 22 inspecciones de venta de alcohol a menores dentro de una campaña de vigilancia en colaboración con policías locales
La Policía Foral denunció el pasado día 4 de noviembre al vendedor de un establecimiento de alimentación y golosinas de Burlada por vender cinco botellas de litro y medio de cerveza, las llamadas "litronas", a un joven de 16 años.
Los hechos tuvieron su origen en la denuncia interpuesta el pasado mes de octubre por un vecino de Burlada en la Oficina de Atención al Ciudadano de la Policía Foral, en la Plaza del Castillo, en la que informó de que en un local de chucherías se dispensaba alcohol a menores de edad. A raíz de la denuncia, la Policía Foral estableció un dispositivo de vigilancia y sorprendió al vendedor en el momento en que cobraba a un menor el importe por la adquisición de cinco “litronas” de cerveza. Los agentes identificaron al comprador y al vendedor, ambos vecinos de Burlada, y extendieron un boletín de denuncia por una infracción a la Ley Foral 10/91 sobre prevención y limitación del consumo de bebidas alcohólicas por menores de edad. La denuncia y el posterior informe han sido tramitados al Ayuntamiento de Burlada para la incoación del correspondiente expediente sancionador.
Durante el mes de octubre la Policía Foral ha realizado 22 inspecciones de venta de alcohol a menores, de las que veinte fueron negativas y dos positivas, que se saldaron con la denuncia relatada y otra realizada por los mismos hechos en un local del barrio de Iturrama de Pamplona.
Las inspecciones, de oficio o por requerimientos de ciudadanos que sospechaban ventas ilegales de alcohol, se han realizado en Pamplona, Buñuel, Carcastillo, San Adrián, Peralta, Burlada y Villava, dentro de una campaña de vigilancia en la que participan coordinadamente las policías municipales de las citadas localidades, ya que son precisamente las que recogen la información ciudadana necesaria para actuar, trasladándola a la Policía Foral.
La Ley foral que regula estos aspectos tipifica como infracciones “leves, graves o muy graves” la venta de alcohol a menores, en función de la cantidad vendida, el grado de alcohol u otras circunstancias, como hacerlo en las inmediaciones de un centro escolar. Las sanciones pueden alcanzar los diez millones de pesetas, además de la prohibición o suspensión de actividad por un periodo máximo de cinco años y la clausura del local durante un periodo máximo de dos años.
