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La Policía Foral detiene a cinco personas acusadas de diferentes delitos
viernes, 22 de diciembre de 2006Agentes de la Policía Foral han detenido recientemente a cinco personas acusadas de cometer diferentes delitos: dos por robos con fuerza, una por malos tratos, una por alcoholemia y otra por atentado.
Por un presunto delito de malos tratos fue detenido el pasado martes un vecino de Beriáin de 46 años. Su mujer presentó una denuncia ante la Policía Foral en la que se relataba un episodio de amenazas y agresiones, presentando también un parte médico que certificaba un hematoma en el ojo. Fue puesto a disposición judicial, dictándose una medida cautelar que le prohibe acercarse a la denunciante durante la causa.
El pasado jueves se procedió a la detención de un pamplonés de 28 años como presunto autor varios robos con fuerza. Un comerciante interpuso una denuncia en la Oficina de Atención al Ciudadano al sospechar que le faltaba dinero de su establecimiento, cantidad que en total ascendía a 1.500 € y que había echado en falta en sumas de diferentes momentos. La investigación, fruto de las sospechas, concluyó con que un trabajador de la tienda era el autor de los hechos, por lo que fue detenido.
Ayer fue detenido un vecino de Pamplona de 46 años como autor de varios robos con fuerza en casetas de obras situadas en puntos de la comarca como Mutilva o Cizur. La Policía Foral recibió varias denuncias que coincidían en sus datos: robos de carteras en obras de la construcción. En varios casos las tarjetas de crédito fueron utilizadas para sacar dinero fraudulentamente. La investigación finalizó con la detención de un delincuente habitual, al que le constan una treintena de delitos similares.
Finalmente, esta madrugada han sido detenidos dos hombres en la carretera N-232-A, a su paso por Tudela. En un control preventivo de alcoholemia se daba el alto a un turismo ocupado por dos vecinos de Tudela, de 30 y 42 años, ambos de nacionalidad colombiana. El conductor fue detenido por presentar síntomas evidentes de haber ingerido alcohol en el vehículo, donde los agentes interceptaron una botella de whisky abierta y dos vasos. El copiloto tampoco pudo hacerse cargo del vehículo al estar influenciado por el alcohol. Además, agredió a uno de los agentes, por lo que se le imputa un delito de atentado por el que ha pasado a disposición judicial en la capital ribera.
