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Las lluvias de los últimos días provocan inactividad en las labores del campo
viernes, 13 de abril de 2007Las precipitaciones que se vienen sucediendo en Navarra están provocando que la inactividad en las labores de campo sea la tónica habitual en estas últimas semanas, según se recoge en el informe semanal sobre la situación del campo, elaborado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, correspondiente al periodo comprendido entre los días 6 y 13 de abril.
Así, desde el punto de vista meteorológico, estos días se han caracterizado por el registro de lluvias generalizadas, muchas de ellas en forma de tormentas, temperaturas acordes con la época y viento de dirección variable. Los secanos cerealistas van acumulando reservas hídricas que de momento permiten asegurar, como mínimo, un buen porte vegetativo de los cultivos. Éstos alcanzan fenologías que van desde estado de dos nudos hasta hoja de bandera en áreas más septentrionales (Cuenca de Pamplona, Tierra Estella, Pirineos y zona noroccidental), se encuentran en plena fase de espigado las cebadas de la Zona Media y sur de Tierra Estella, mientras que en la Ribera los trigos duros y cebadas proceden ya al espigado.
Sin embargo, aunque en términos generales las lluvias que se vienen registrando están siendo muy bien recibidas y son muy beneficiosas para los secanos de las comarcas cerealistas, en zonas de Pirineos, Cuenca de Pamplona y zona noroccidental, la segunda mano de nitrogenados de cobertera no se ha llegado a completar, y se espera con impaciencia a buenos temperos para valorar si es rentable o no completar dichos abonados. A su vez, en algunas zonas la aplicación de herbicidas no se ha podido realizar o su efecto no ha sido el deseado, y en zonas con encharcamientos en parcelas se están registrando algunos problemas.
Por otro lado, las habas caballares y guisantes proteaginosos continúan con su buen desarrollo; las primeras están ya recuperadas bastante bien del encamado sufrido por la última nevada y los segundos en fase de floración. Las colzas prosiguen con su buen año y se encuentran en plena floración e importante porte vegetativo. Por el contrario, se observa una nula actividad en la preparación y siembra de girasol en zonas de la Cuenca de Pamplona o Pirineos, donde los agricultores comienzan a impacientarse, ya que las fechas óptimas de siembra van pasando.
Respecto a cultivos forrajeros, en áreas del norte (Ultzama, Odieta, Sakana, Imotz o Larráun) se espera con impaciencia para proceder al corte y posterior ensilado de no pocos “westerwolds” que sufrieron encamados por la nevada y se encuentran ya en fase de espigado. Sin embargo, se observan meros inicios de cortes de “westerwold” en regadíos de la Ribera.
En cuanto a la ganadería, salvo ovino y caballar continúa estabulada en su mayor parte, y se espera buenas condiciones climáticas unido a buenos temperos para que su presencia en campo sea masiva.
Cultivos hortícolas y de regadío
Los cultivos hortícolas y de regadío continúan con los problemas hídricos de finales de marzo. Las importantes precipitaciones con que comenzó este mes de abril, unidas a las registradas en la última semana de marzo, han continuado inundando los campos en las márgenes de casi todos los ríos de la Comunidad Foral, con los consiguientes daños en tierras y cultivos. Cultivos como espárrago (Tierra Estella y Ribera Alta), alcachofa (ambas comarcas de la Ribera), invernaderos con lechuga o tomate, así como parcelas de alfalfa o cereal han sido los más afectados. Pero los problemas no se limitan solamente a esto, sino a las dificultades para poder preparar las tierras para continuar o comenzar las siembras y plantaciones pendientes de patata, cebolla, maíz o tomate.
En los días de ausencia de precipitaciones de la segunda mitad de esta semana se han podido dar por terminadas las siembras directas de cebolla en Ribera Baja, y se ha continuado con la plantación en taco de turba. También las siembras de guisante verde para industria se dan por finalizadas, pero ya por lo avanzado de las fechas, pues se han quedado sin poder sembrar por la lluvia unas 140 ha, 60 de ellas en Valdizarbe.
En Ribera Baja están sembradas las primeras parcelas de maíz y también se ha comenzado con el primer corte a la alfalfa que ya se ha mojado con las tormentas de más de 30 l/m2 que ayer día 12 se recogieron en esta comarca. Las lluvias tampoco permiten finalizar la recolección del maíz grano que todavía queda en algunos regadíos de Cáseda y Aibar, ni preparar las tierras para las próximas siembras.
Ha comenzado a comercializarse algo de espárrago para mercado fresco, la poca oferta actual no permite comenzar con su fabricación. Ha sido un mal comienzo de campaña, con muchas dificultades para poder preparar los caballones e iniciar la recolección con normalidad, aparte de los daños en nuevas plantaciones y sin poder terminarlas con la planta en cámaras frigoríficas.
La hortaliza estrella en estos momentos es la alcachofa, cuya producción va en aumento y con una calidad excelente, comercializándose casi toda para mercado fresco.
