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La muestra fotográfica “Pastores, montañas y quebrantahuesos” se expone en los Centros de Interpretación de la Naturaleza pirenaicos de Navarra
jueves, 24 de abril de 2008La muestra fotográfica “Pastores, montañas y quebrantahuesos” se expone en los Centros de Interpretación de la Naturaleza pirenaicos de Navarra. Así, la exposición se puede contemplar hasta el 27 de abril en el Centro de Interpretación de la Naturaleza de Lumbier; del 1 al 31 de mayo, en el Centro de Interpretación de la Naturaleza de Ochagavía, y del 1 al 30 de junio, en el Centro de Interpretación de la Naturaleza de Roncal.
La muestra, cedida por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos, se compone de 33 imágenes del fotógrafo de naturaleza Francisco Márquez. De este modo se pone de manifiesto la importancia vital que para los quebrantahuesos tiene la conservación de las montañas y la pervivencia de la ganadería en régimen extensivo, ya que es la única ave del mundo que se alimenta exclusivamente de huesos que obtiene de animales salvajes y domésticos.
El quebrantahuesos estuvo a punto de desaparecer de las montañas de la Comunidad Foral pero los planes de recuperación han conseguido el resurgir de la especie. Actualmente 8 parejas nidifican en Navarra. Igualmente, esta especie se localizó en todas las montañas de la Península Ibérica, pero a partir del siglo XIX, comenzó un proceso de regresión de la especie que le ha llevado a concentrarse en los Pirineos, y, especialmente, en la parte central de esta cordillera.
Actualmente la población reproductora de quebrantahuesos se reduce a 100 parejas. Estas cifras se encuentran en el límite de lo que se considera una población genéticamente viable, con posibilidad de supervivencia a largo plazo. Por eso, las diferentes Administraciones, entre ellas el Gobierno de Navarra, la incluyen entre las especies con un máximo nivel de protección.
A finales de la década de los 80 el quebrantahuesos prácticamente había desaparecido de las montañas navarras. Los Planes de Recuperación que se han ido poniendo en práctica durante los últimos 25 años han conseguido hacer remontar la especie y su capacidad reproductora. En estos momentos, en Navarra existen cuatro zonas de interés para la recuperación de estas rapaces y están en marcha una serie de planes de choque que han conseguido aumentar los nidos presentes en las montañas navarras hasta los ocho actuales.
Sin embargo, la supervivencia de dicha especie continúa amenazada porque se trata de un ave especialmente sensible a la contaminación y que se ha visto afectada por la pérdida de la actividad pastoril en la montaña, de la que el quebrantahuesos consigue su alimento al nutrirse de los animales salvajes y domésticos que mueren en su entorno.
