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El vicepresidente Caballero atribuye al Consejo de Navarra el incremento de seguridad jurídica en la Comunidad Foral
miércoles, 04 de junio de 2008El presidente del Consejo de Navarra acude a la tercera jornada del ciclo formativo sobre las instituciones forales, dirigido a empleados públicos
El presidente del Consejo de Navarra, Enrique Rubio, el vicepresidente Caballero y el director del INAP, Ignacio Bandrés, en el acto de inauguración de la sesión.
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El vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Javier Caballero Martínez, considera que la “profesionalidad y buen hacer” del Consejo de Navarra ha hecho que en la Comunidad Foral haya aumentado la seguridad jurídica, “hasta el extremo” de que sus dictámenes siempre han sido atendidos por el Gobierno en la toma de decisiones.
En su opinión, este órgano consultivo de la Comunidad Foral ha sabido centrarse en la realización de su cometido “con discreción y sencillez y al mismo tiempo con gran brillantez, ganándose a pulso un elevado prestigio en los ambientes jurídicos”, lo que atribuyó a la “alta cualificación de sus integrantes”,
El vicepresidente primero hizo esta valoración ayer con motivo de la inauguración de la tercera jornada del ciclo formativo que, sobre las instituciones forales, oferta el Instituto Navarro de Administración Pública (INAP) a los empleados públicos, dedicada en esta ocasión al Consejo de Navarra y en la que participó, entre otros, el presidente de este órgano, Enrique Rubio Torrano, también catedrático de Derecho Civil de la Universidad Pública de Navarra.
A la apertura de la sesión, que se desarrolló en la sede del INAP, acudió el director de este organismo, Ignacio Bandrés Urriza y, además de la intervención de Rubio Torrano, los asistentes pudieron escuchar otras dos ponencias sobre “La revisión de los actos administrativos y el Consejo de Navarra” y la “Intervención del Consejo de Navarra en la elaboración de las disposiciones reglamentarias”, a cargo de los consejeros de este órgano Alfonso Zuazu Moneo y Alfredo Irujo Andueza.
El origen de la creación del Consejo de Navarra mediante la Ley Foral 8/1999 se encuadró en el fenómeno generalizado de constitución de consejos consultivos por las Comunidades Autónomas. El modelo escogido no fue el de configurar el Consejo de Navarra como consejo consultivo del Gobierno sino de todas las instituciones de la Comunidad Foral (Parlamento, Gobierno de Navarra y de entidades locales). Además, hunde sus raíces en el autogobierno, tomando el testigo del Supremo Consejo Real de Navarra, al que correspondía asesorar en la función de gobierno y velar por la legalidad o foralidad de las disposiciones emanadas del poder real a través del derecho de sobrecarta.
El curso sobre las instituciones forales se organizó con motivo del XXV aniversario de la Lorafna y está dirigido a empleados públicos.
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Según recalcó el consejero en su intervención, se trata además de un órgano técnico, no de carácter político y de asesoramiento jurídico; autónomo, es decir, no está sometido a mandato ni instrucciones de ningún poder de Navarra; imparcial y colegiado.
Al respecto, Caballero resaltó que el legislador navarro, frente a otras experiencias, tuvo claro desde el principio que el éxito del órgano radicaba en huir de la aplicación de cuotas partidistas a la hora de la elección de sus miembros, buscando para la designación de sus miembros a quienes mejor pudiesen desarrollar sus funciones en base a su profesionalidad y buen hacer.
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