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Las bajas temperaturas diurnas y las heladas nocturnas generalizadas dificultan la actividad agrícola y ganadera en buena parte de Navarra

lunes, 19 de enero de 2009

Los rigores invernales obligan a la estabulación de gran parte de la cabaña ganadera y están condicionando el desarrollo de los cultivos de secano y de regadío


Ganado estabulado

Ganado estabulado. ( ampliar imagen )

Las bajas temperaturas diurnas y las heladas nocturnas generalizadas registradas en Navarra a lo largo de la última semana han dificultado la actividad agrícola y ganadera en buena parte de la geografía foral, según se desprende de los datos recogidos en el Informe semanal sobre la situación del campo, correspondiente a los días 9 a 16 de enero, elaborado por el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra.


El citado informe señala que la última semana se ha caracterizado por el registro de heladas nocturnas y de temperaturas diurnas inferiores a las históricas, además de por la presencia de intensos bancos de niebla, jornadas con precipitaciones generalizadas y presencia puntual de nieve en gran parte de la Comunidad.


Estas circunstancias han condicionado la actividad agrícola en los secanos cerealistas, en los que la actividad continúa siendo escasa. Los suelos están pesados y los cultivos, en líneas generales, presentan buen aspecto y están entrando en pleno proceso de ahijamiento, si bien las bajas temperaturas están limitando el desarrollo aéreo de la planta en detrimento del radicular. El informe reseña los problemas que se están dando en siembras más tardías de zonas problemáticas por su humedad, donde el cultivo con fenologías de 1 a 3 hojas está sufriendo las bajas temperaturas y el exceso de humedad, condicionando seriamente su desarrollo.


En el capítulo de abonados y tratamientos, desde el Departamento de Desarrollo Rural se indica que se procede con dificultades y que se aprovechan las heladas matinales para entrar en el campo. Se está procediendo a la aportación de la primera mano de nitrogenados en la Cuenca de Pamplona, Pirineos, Tierra Estella y Zona Media, donde este año, más si cabe, se ajusta la dosis a aplicar con el fin de reducir los altos costes de producción. En cuanto a herbicidas, la dificultad para realizar los tratamientos (suelos pesados, fuertes heladas), y dada la fenología en la que se encuentran muchas parcelas, va a limitar la aplicación que se pretendía de herbicidas radiculares (“baratos”) y se tendrá que tratar con los foliares (“caros”).


En otro orden de cultivos, las habas caballares sufren algo de pérdida de masa foliar debido a las fuertes heladas. Las colzas, que se encuentran en estado fenológico de roseta, de momento aguantan bien el rigor del invierno. Los Raygrass Westerwold de la zona de los Valles-Sakana, las siembras tardías, unido a las frecuentes precipitaciones y encharcamientos, además de las bajas temperaturas que se están registrando, están condicionando no pocas parcelas, dándose bastante pérdida de planta.


Cultivos de regadío


La evolución meteorológica registrada durante la semana ha condicionado la actividad agrícola en los cultivos de regadío en las distintas comarcas de Navarra. Las bajas temperaturas soportadas, unidas a la persistencia de las nieblas y altas humedades, han repercutido en la ralentización y, en algunos cultivos, parada vegetativa, así como en la intensidad de la actividad agrícola. La alcachofa no logra sobreponerse a las adversidades invernales y cada día son más las parcelas en las que manifiestan los rigores de las heladas, no sólo en el oscurecimiento de las cabezas, sino con lesiones más importantes en la planta.


En cuanto a las crucíferas, una de las familias más afectadas, a la evolución deficiente del cultivo de bróculi y coliflor registrada en esta campaña se ha unido la meteorología tan poco favorable de los últimos días, lo que se refleja en unas producciones y calidades inferiores a las habituales, lo que repercute especialmente en la industria congeladora, principal demandante de estas verduras.


Los excesos de humedad siguen dificultando, también, las tareas de recolección de algunos cultivos como la endivia (Comarca VI) y la remolacha azucarera en la zona de Cabredo y Marañón, donde prácticamente no se ha iniciado su arranque.


Los cultivos forzados bajo plástico también están padeciendo los rigores invernales. Los agricultores están realizando labores de manteniendo de los invernaderos y espaciando los cortes de las verduras en intervalos más largos, debido al poco desarrollo que alcanzan las plantas con el frío. Otro cultivo forzado que está padeciendo los avatares del clima es el tomate en hidropónico que ya estaba plantado, que necesita mayor calorifugación para compensar las bajas temperaturas y que la planta no sufra en su desarrollo vegetativo.


Las esparragueras están comenzando a recibir las atenciones preparatorias para la nueva campaña que se iniciará con la primavera. Los restos de la campaña anterior están siendo cortados, a la vez que se están abriendo los surcos para la nueva implantación.


Ganadería


En lo que a ganadería se refiere, el informe señala que el tiempo de este otoño-invierno está obligando a la estabulación de gran parte de la cabaña ganadera, con el consecuente aumento de los costes de producción. La situación que vive el sector cárnico (ovino de carne, vacuno de carne, porcino, conejo) sigue siendo preocupante, ya que los costes de producción son muy altos, mientras que la venta de productos en origen no alcanza precios competitivos que permitan obtener, no ya márgenes netos adecuados, sino sostenibles.



Gobierno de Navarra

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