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Vivienda ha destinado 8 millones de euros en diez años a compra de vivienda de integración social miércoles, 27 de mayo de 2009
El consejero Esparza ha avanzado en una conferencia de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza que la alternativa va a ser el alquiler
El consejero, durante la conferencia sobre la vivienda como factor de inclusión social.
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El departamento de Vivienda y Ordenación del Territorio ha destinado en los últimos diez años, entre 1998 y 2008, 8,3 millones de euros al programa de vivienda de integración social, que han permitido que 2.704 beneficiarios hayan adquirido un total de 792 viviendas, según datos que ha aportado esta mañana el consejero José Carlos Esparza Sáez en las jornadas que ha organizado en la UPNA la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza sobre “La vivienda como factor central en los procesos de inclusión o exclusión social”.
A estas viviendas, usadas, pueden acceder personas que cuentan con unos ingresos familiares ponderados inferiores a 1,7 veces el IPREM, esto es, 14.541,63 euros en caso de un solo solicitante, 17.449,96 para una pareja o 19.829,50 euros en el caso de pareja con dos hijos.
Deben participar en actuaciones de vivienda de integración y suscribir un contrato con algunas de las entidades que colaboran en los programas. Se trata de viviendas usadas, con más de 15 años de antigüedad y mínimas condiciones de habitabilidad, con un precio de referencia para su adquisición fijado en 2009 en los 104.000 euros para 90 metros cuadrados. La subvención oscila entre el 30 y 60%. El Departamento de Asuntos Sociales, en colaboración con el cual se desarrolla el programa, se hace cargo de los gastos derivados de la escrituración y las subvenciones están exentas de tributación.
Sin embargo, según ha explicado el consejero, el programa ha languidecido en los últimos años. En 2008 sólo se suscribieron 19 compras, frente a las 88 de 2003, por ejemplo. Según ha explicado el consejero Esparza, las principales causas están en el incremento de los precios de la vivienda, que ha dificultado conseguir viviendas asequibles y dignas -casi todas las actuaciones se han ido concentrando en localidades del sur de Navarra- y la dificultad para conseguir financiación bancaria por parte de los compradores.
Debido a esta situación, el consejero ha subrayado que al inicio de legislatura planteó la conveniencia de potenciar, como alternativa, el alquiler, específicamente también para este colectivo. Al respecto, ha recordado que en la nueva Ley Foral del Derecho a la Vivienda, cuyo anteproyecto ha sido recientemente presentado, se establecen importantes medidas para reforzar el Sistema Publio de Alquiler. Así, ha destacado que el 60% de las nuevas viviendas protegidas de alquiler se destinarán a solicitantes con ingresos inferiores a 1,7 el IPREM. También habrá un único tipo de VPO, cuyo precio será incluso un poco más bajo que el actual.
Los inquilinos abonarán, de acuerdo con una moción tratada en el Parlamento, un importe no superior al 30% de sus ingresos cuando se cumplan los requisitos mínimos de acceso.
Más vivienda pública de alquiler
Según ha recordado Esparza, esta legislatura se van a construir 2.000 viviendas públicas de alquiler. “Junto con la captación de viviendas de segunda mano, van a satisfacer el derecho a una vivienda digna por parte de los más desfavorecidos. Permitirá equilibrar la vivienda en propiedad y en alquiler favoreciendo sin duda a las clases menos favorecidas”, ha dicho.
Esparza también ha recordado que en 2003 la Comunidad Foral fue pionera en la obligatoriedad de que todas las nuevas urbanizaciones previeran parcelas propiedad del Gobierno de Navarra para construir viviendas públicas de alquiler, lo que va a permitir en cuatro años triplicar el parque histórico de viviendas públicas de alquiler.
