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Los agentes supervisan también los festejos populares
La brigada de Juegos y Espectáculos de la Policía Foral supervisará durante este año los 59 festejos taurinos con muerte de res que tendrán lugar en Navarra, además de los dos desarrollados en marzo en Fitero los que se han programado a partir de la novillada de picadores de Pamplona del 5 de julio.
Asimismo, los agentes visitarán al menos una vez las localidades en las que se celebren espectáculos sin muerte de res (suelta de vaquillas, en su mayor parte) promovidos por ayuntamientos con motivo de las fiestas patronales propias del periodo estival.
En concreto, ante la ausencia este año de espectáculos con muerte en Castejón, la temporada taurina de Navarra tendrá su continuidad en la novillada con picadores de Pamplona del 5 de Julio y concluirá el 29 de septiembre en Corella con una corrida de rejones. De los 59 espectáculos con muerte de res de 2010, 12 tendrán lugar en Pamplona con motivo de las fiestas de San Fermín. En total, 14 localidades acogerán este tipo de festejos: Fitero, Pamplona, Tudela, San Adrián, Estella, Lodosa, Tafalla, Peralta, Andosilla, Olite, Corella, Cintruéñigo, Sangüesa y Cascante
En relación con 2009, el número de espectáculos con muerte de res ha aumentado en tres (56 en 2009), aunque se percibe una tónica de reducción a consecuencia de la crisis económica respecto a periodos anteriores (en 2008 hubo 70), si bien se mantienen las solicitudes de festejos populares, sin muerte de res. Según datos de la Dirección General de Interior, fueron autorizados 1.169 en 2009, más que en 2008 (1.107) pero menos que en 2007 (1.205). La Policía Foral visitó 288 espectáculos sin muerte.
En los primeros, la brigada de Juegos y Espectáculos detectó 70 infracciones, 60 de ellas a lidiadores o rejoneadores por exceso de banderillas, utilización de rejones de castigo no reglamentarios, picadores que impedían la salida a la res o por realizar acciones que alteraron el espectáculo. Otras deficiencias detectadas fueron la presencia de espectadores sin autorización en el callejón, lanzamiento de objetos al ruedo o el retraso en la llegada de la ambulancia o de lidiadores.
Otras 70 infracciones fueron detectadas en espectáculos sin muerte, siete por contar con una ganadería no autorizada. El resto se debieron a la ausencia de médico, falta de documentación de las reses, alteración del orden público, carecer de director de lidia, presencia de reses sin herrar, utilización de machos en espectáculos sólo autorizados para vacas o participación de menores.
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