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El cese de las lluvias la pasada semana favoreció la aplicación de herbicidas en las zonas ceralistas miércoles, 22 de diciembre de 2010
Se sigue cortando cardo con buenas producciones y calidad, a pesar de las bajas temperaturas
El cese de las precipitaciones la pasada semana en zonas cerealistas Noroccidental, de Pirineos, Cuenca de Pamplona, norte de Navarra Media y Tierra Estella ha favorecido el drenaje de los suelos y permitido la entrada en el campo de maquinaria pesada para aplicar herbicidas, con el fin de hacer frente a la alta infestación de hierbas como avena loca, cola zorra, ballueca, bromo, vallico, lapa y amapola, entre otras presentes en los cultivos. Asimismo, los fuertes hielos registrados y las rachas de cierzo que se han producido no son las condiciones propicias para la eficiencia de las sustancias activas, por lo que muchos agricultores esperan a condiciones climáticas más favorables, según los datos incluidos en el informe semanal sobre la situación del campo, elaborado por el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente.
En cuanto a los cultivos en sí, trigos, avenas y cebadas sembradas a lo largo de octubre y primera decena de noviembre se encuentran en pleno ahijamiento y en líneas generales presentan un buen aspecto, mientras que sementeras de la segunda quincena de noviembre se encuentran con una o dos hojas desplegadas. En la Ribera y zonas secas de Navarra Media y Tierra Estella las precipitaciones durante este otoño no han sido muy abundantes y esta semana, la falta de humedad y el frío presente, no han propiciado la implantación y desarrollo de estos cultivos. De continuar la ausencia de lluvias y el frío, la pérdida de plantas, sobre todo en parcelas más atrasadas, puede empezar a ser significativa.
En cuanto a los tratamientos, la incidencia de zabro (Zabrus Tenebrioides) durante este otoño, es escasa y muy localizada, por lo que se han realizado tratamientos puntuales para controlar esta plaga, si bien la llegada del frío, el avance fenológico del cultivo y su baja presencia hasta el momento, ayudarán a disminuir los posibles daños.
Respecto a los cultivos de regadío, aunque los que se mantienen en el campo van disminuyendo con el paso de los días, el ritmo de recolección es lento y la superficie recolectada es inferior a la de otros años por estas fechas, tal es el caso de las crucíferas y el maíz, principalmente.
En el caso del cereal, aumenta el ritmo de recolección con buenos rendimientos en general, pero las humedades, como la semana pasada, siguen siendo algo más elevadas de lo deseable. En la Ribera Baja, donde ya se ha cosechado la mayor parte de la superficie cultivada, se está entregando con humedades en torno a 18-20%, procedentes de siembras tempranas, mientras en el resto de las zonas con siembras más tardías, como en el caso de la ribera del Aragón, son muy escasas las remesas por debajo del 20%. En cuanto a las crucíferas, el bróculi está recuperando el retraso en el desarrollo y en la recolección, aunque todavía es muy considerable la cantidad de producto que permanece en las parcelas.
Respecto a la coliflor, la cosecha que ha entrado en las congeladoras es una porción muy pequeña con respeto a lo contratado, y podría comenzar a deteriorase algo el cultivo de variedades tempranas que no hayan podido ser recolectadas. Todavía se están cortando parcelas de las variedades tipo casper que deberían estar acabadas en noviembre, mientras que la meridien permanece en la mata en la mayor parte de las parcelas. En estos dos cultivos se están adelantando perspectivas altas de plantación para la campaña de primavera.
El cardo se sigue cortando tanto para la industria como para plaza. Sin verse afectadas por las heladas, las producciones y calidades son muy buenas en las parcelas con las plantas atadas, mientras que en las más tardías, que permanecían sueltas, el grado de afección observado, hasta la fecha, ha sido muy ligero. En los regadíos de Azagra ya se han cortado la mayoría de las parcelas destinadas a la congelación, mientras que en la zona de Falces o Peralta va más retrasada la recolección.
Las verduras de hoja como la borraja y acelga cultivadas al aire con destino a la industria conservera o congeladora ya se han recolectado prácticamente todas, quedando algunos restos de la última, que se rematarán en estos días. La recolección de alcachofa ha quedado interrumpida en las fincas donde la brotación de otoño hacía posible el corte hasta principios de año, si el tiempo acompaña y no hiela con frecuencia.
La recolección de aceituna, casi finalizada en las Comarcas VI y VII
La recolección de aceituna ha finalizado prácticamente en las Comarcas VI y VII con buenos rendimientos y calidades, mientras sigue su ritmo en la Zona Media con más de la mitad de la producción recolectada. En esta zona parece que los daños de las heladas han sido bastante más leves de lo previsto en un principio, ya que los sistemas de cultivos en laderas y la variedad predominante soportan mejor las bajas temperaturas. Las nuevas superficies que van entrando en producción, cultivadas en su gran mayoría mediante sistemas de riego por goteo, así como los buenos rendimientos de las plantaciones, sólo ligeramente inferiores a los muy altos que se alcanzaron la campaña pasada, arrojan una producción total de aceituna muy similar a las de 2009; sin embargo la cantidad de aceite obtenida será algo superior ya que al transcurrir un verano y otoño secos, los rendimientos en grasa de las olivas son más elevados que los del año pasado. La calidad, como viene siendo habitual en Navarra, será en su gran mayoría virgen extra.
Las últimas siembras de vezas y guisantes proteaginosos de la Cuenca de Pamplona, Pirineos y Navarra Media presentan fenologías desde brotación hasta 2-3 hojas desplegadas, y de momento aguantan las bajas temperaturas a la espera de mejores condiciones climáticas (humedad y suaves temperaturas) para conseguir un impulso en su desarrollo, y asegurar así su implantación en campo.
Respecto a colzas de Navarra Media, Cuenca de Pamplona y Pirineos, las bajas temperaturas no ayudan para nada a este cultivo sensible a las heladas en fenologías precoces, si bien de momento el cultivo aguanta. Reseñar que las dificultades en la nascencia sufridas en esta campaña han propiciado la presencia de parcelas desiguales, con zonas con una buena presencia de planta por metro cuadrado y otras donde el cultivo brilla por su ausencia.
Finalizada la recolección de tomate en los invernaderos calefactados con cultivo hidropónico, los cultivos bajo techo predominantes son las acelga, borraja y mayoritariamente la lechuga. Todos ellos mantienen su ritmo de corte y plantación. Los rendimientos son los habituales, aliviados en cierta medida por una ligera mejoría de la demanda, reflejada tanto en cuanto a las cantidades como a los precios.
La mayor parte del ganado vacuno se encuentra estabulado, por lo que sólo caballar, y sobre todo ovino, está en el campo, si bien la mayor parte se encuentra ayudado por alimentación suplementaria. Así, ganado ovino de la zona Norte aprovecha pastos próximos a la explotación, sobre todo parcelas sembradas a principios de la otoñada con ray-grass Italiano, mientras que en la Ribera los rebaños aprovechan los escasos ricios de cereal presentes, así como restos de cultivos en regadío de maíz, bróculi o coliflor entre otras. Mientras, en aquellas zonas donde el suelo lo permite, se aprovecha este receso en las precipitaciones para la extracción y aplicación de purines y/o estiércol en campo.
Meteorología entre el 10 y el 17 de diciembre
El periodo comprendido entre los días 10 y 17 de diciembre se ha caracterizado por la ausencia de precipitaciones significativas, temperaturas inferiores a las históricas, registrándose heladas generalizadas en varias jornadas, y predominio de viento norte que ha acentuado la sensación de frío. Éste ha sido el protagonista en este periodo con heladas que han estado entre -1 ºC a -8 ºC según zonas, en la mayor parte de las jornadas y temperaturas medias, de máximas por debajo de los 10 ºC en prácticamente toda la Comunidad Foral.
Así, las bajas temperaturas registradas en estos días provocan la ralentización del desarrollo vegetativo de los cultivos en general, donde la ausencia de precipitaciones permite llevar a cabo en las zonas de regadío la recolección de los cultivos presentes en esta época y el laboreo de rastrojeras de maíz y hortícolas, mientras que en los secanos la actividad es escasa y se centra principalmente en la aplicación de herbicidas en los cultivos cerealistas.
