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El Gobierno destina un millón de euros en ayudas a la contratación de personas con discapacidad miércoles, 23 de febrero de 2011
Los destinatarios son once centros especiales de empleo ubicados en Navarra
El Gobierno ha suscrito un convenio con once centros especiales de empleo.
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El Gobierno de Navarra, a través del Servicio Navarro de Empleo, ha suscrito un convenio de colaboración con once centros especiales de empleo de Navarra, para impulsar la contratación de personas con discapacidad. La ayuda, cuyo importe asciende a un millón de euros, servirá para sufragar la empleabilidad de los trabajadores considerados como de especial dificultad para su inserción laboral.
Se entiende como tales las personas con parálisis cerebral, enfermedad mental o discapacidad intelectual con un grado de discapacidad reconocido igual o superior al 33%, siempre que al menos un 25% se derive de una de estas discapacidades. Asimismo, pertenecen a este grupo las personas con discapacidad física o sensorial, con un grado de discapacidad reconocido igual o superior al 65%; y las personas con discapacidad física o sensorial reconocida en grado inferior al 65% y con una edad de 50 años o más.
En la firma ha participado el consejero de Innovación, Empresa y Empleo, José María Roig Aldasoro, junto con el director gerente del SNE, José Luis Ruiz, y los representantes de los once centros beneficiarios que son: AMIMET-CANRASO; Gupost- Naarra, S.L.; Fundación Aspace Navarra para el empleo; Asociación sin fronteras-Albernia; Nasermo, S.L.; Fundación Bidean Laboral; Elkarkide, S.L.; FEVIMAX-LOGÍSTICA, S.L.; DYA Servicios discapacitados, S.L.; Asociación disminuidos físicos y psíquicos de Corella; y Tasubin, S.A.
La función de estos centros consistirá en asistir al trabajador en el proceso de incorporación al mercado ordinario de trabajo; detectar y determinar, previa valoración de capacidades de la persona y análisis del puesto de trabajo, las necesidades de apoyo para que éste pueda desarrollar su actividad profesional; o establecer la relaciones precisas con el entorno familiar y social de los empleados del centro para que sean un instrumento de apoyo y estímulo al trabajador en la incorporación a un puesto de trabajo y la estabilidad en el mismo.
Asimismo, deberán desarrollar cuantos programas de formación sean necesarios para la adaptación del trabajador con discapacidad al puesto de trabajo, así como a las nuevas tecnologías y procesos productivos; establecer apoyos individualizados en el puesto de trabajo; favorecer y potenciar la autonomía e independencia del trabajador, principalmente, en su puesto de trabajo, así como la integración de nuevos trabajadores al centro especial de empleo mediante el establecimiento de los apoyos adecuados a tal fin; y detectar e intervenir en los posibles procesos de deterioro evolutivo de los trabajadores con discapacidad a fin de evitar y atenuar sus efectos.
