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Las lluvias de los últimos días han favorecido el rebrote de los pastos y el laboreo del rastrojo, aunque han perjudicado a los regadíos y sus cultivos hortícolas

viernes, 05 de septiembre de 2003

Las lluvias registradas en los últimos días han mejorado la puesta a punto de los temperos en secano, han favorecido el rebrote de los pastos y el laboreo del rastrojo, aunque han paralizado la recolección del girasol y del maíz de secano y han perjudicado a los regadíos y sus cultivos hortícolas. Esta es la principal novedad del estudio semanal del campo navarro entre los días 29 de agosto y 5 de septiembre, realizado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación.


En concreto, la recogida del girasol se encontraba ya muy avanzada en el área noroccidental de Navarra y en la Cuenca de Pamplona, situación que puede aplicarse también al maíz de áreas de secano para su encasillado en verde, y cuyos rendimientos, en algunos casos, no superan el 50% de una cosecha normal. En aquellos lugares donde ya ha culminado la recogida, se inician las siembras de Westervold, cultivo al que se dedican una gran parte de las superficies ocupadas por el maíz.


En cuanto a los pastizales, con las lluvias y el descenso de temperaturas registradas han iniciado un aparente verdeo o ligero repunte. A pesar del escaso aporte energético de estos pastizales, un buen número de vacunos de carne, caballares y algunos ovinos están en el campo para aprovecharlos.


Perjuicios en los cultivos hortícolas


En cultivos como tomate y pimiento, los efectos negativos de las altas temperaturas de julio y agosto se verán agravados por las lluvias, lo que dificultará más una campaña que de por sí ya se presentaba complicada. Los rendimientos de tomate se verán mermados considerablemente (aproximadamente en un 50%), así como la repercusión en la calidad de los frutos, al favorecer la proliferación de enfermedades y dificultar su tratamiento.


Otros cultivos de reciente plantación como coliflor y bróculi, que se iban reponiendo de los excesos térmicos, presentan dificultades para aplicar los tratamientos fitosanitarios contra orugas y pulgones, además de impedir el proceso continuo de plantación que requieren estas especies. También se observan faltas entre líneas como consecuencia de fallos durante la plantación. En concreto, la superficie en el cultivo de coliflor se ha visto sensiblemente reducido para esta campaña, no así en el caso del bróculi, que aumentará en torno a las 5.000 has.


En las plantaciones nuevas de alcachofas se observan fallos de cierta consideración (llegan hasta el 30%), en los pies plantados en julio. Sin embargo, en las plantaciones posteriores su arraigo ha sido bueno, lo mismo que su desarrollo.


En caso de que continúen las precipitaciones, en las viñas puede aparecer cierto riesgo de botritis, que se verá reducido si cesan las lluvias y aparece el cierzo.


En Tierra Estella, el cultivo de remolacha se desarrolla favorablemente, al igual que la recolección de tabaco. No ocurre lo mismo con la patata tardía que, según los muestreos efectuados, viene mermada tanto en el número como en el tamaño de los frutos.


Por último, en los frutales continúa la recolección con ciertos problemas de coloración y tamaño en manzanas rojas. La pera finaliza la recogida de "blanquilla" y continúa a buen ritmo la de "conferencia". En cuanto al melocotón, se inicia con buenas perspectivas la variedad más típica para el destino conservero, la denominada "miraflores".


Gobierno de Navarra

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