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Editada la obra de Carlos J. Martínez Álava "Del románico al gótico en la arquitectura navarra"
martes, 05 de junio de 2007El Departamento de Cultura y Turismo ha editado la obra de Carlos J. Martínez Álava “Del románico al gótico en la arquitectura de Navarra”, dentro de la serie Arte. El libro es un resumen del primer volumen de su tesis doctoral, defendida en la Universidad de Navarra y que recibió el premio de la Real Academia de Doctores de España a la mejor tesis de Humanidades presentada en el curso 1998/1999.
Portada de la publicación.
Como en otros lugares del occidente cristiano, el reino de Navarra vivió entre el último tercio del siglo XII y los primeros decenios del XIII una eclosión constructiva que creó algunos de sus edificios medievales más significativos, como los grandes monasterios de La Oliva (hacia 1165) y Fitero (hacia 1175), a los que hay que añadir la nueva orientación de las obras de Irache.
En torno a 1175 se promueven un buen número de templos, ya principalmente urbanos, como el monasterio de Iranzu, la catedral de Tudela, San Pedro de la Rua, Santa María Jus del Castillo y San Miguel en Estella. También entonces se reactiva la construcción de Santa María de Sangüesa, iniciada también en la primera mitad del siglo XII. Durante los últimos años del siglo se emprende la construcción de San Pedro de Olite, San Nicolás de Pamplona y San Juan de Estella. En ese momento se erige también el Palacio Real de Pamplona, y se reforman diversas estancias de la catedral de Pamplona y el palacio viejo de Olite. El análisis de estos edificios conduce desde el tardorrománico hasta el primer gótico en una evolución creativa que no desemboca, por lo menos directamente, en el gótico clásico.
La mayor parte de los edificios muestra una compleja evolución. La prolongada duración de las fábricas motivó la convivencia de ciertas inercias tradicionales con la implantación y desarrollo de los nuevos conceptos estilísticos. Las fases constructivas se suceden en un amplio intervalo cronológico que va desde los primeros años del último tercio del siglo XII hasta mediados del siglo XIV. Lógicamente, el periodo de formación y plena vigencia de las propuestas arquitectónicas analizadas se desarrolla entre el último tercio del siglo XII y el primero del XIII. La mayoría de las características formuladas se constata ya en torno a 1200.
Carlos J. Martínez Álava se licenció en Geografía e Historia, sección Historia del Arte, por la Universidad Complutense de Madrid en 1987. Durante los cursos 88/89, 89/90 y 90/91 fue becado por el Gobierno de Navarra dentro del programa de Formación de Personal Investigador. Es doctor en Historia del Arte por la Universidad de Navarra desde 1999 y recibió el Premio de la Real Academia de Doctores a la mejor tesis de humanidades defendida en España durante el curso 1998/1999.
Además de numerosos artículos divulgativos de historia local, entre sus publicaciones se pueden citar “La escultura gótica”. “En La Catedral de Pamplona”. Vol. I, pp. 274-354, Pamplona, 1995; “Itinerarios por el Casco Viejo. Seis paseos para no perderse Pamplona”. Pamplona, 1999; “Del románico al gótico en la arquitectura rural de los valles occidentales de la merindad de Estella”. Príncipe de Viana, Pamplona (2000), p. 307-348; “Arte español del siglo XX”. Fundación Universidad de la Rioja. 2000. Coautor junto a Javier Manzanos Garayoa; “El arte románico en Navarra”. Pamplona, 2002. Coautor junto a Clara Fernández-Ladreda y Javier Martínez de Aguirre; “Del románico al gótico en la arquitectura de Navarra: un problema terminológico entre creación y evolución” Príncipe de Viana, Pamplona (2003), p. 255-293, y “La imagen de Santa María y los sepulcros medievales”, “En La Catedral de Tudela”, Pamplona, 2006.
