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La planta de tratamiento de residuos sólidos de La Ribera ultima su puesta en marcha
lunes, 13 de agosto de 2007Las instalaciones se encuentran al mismo nivel de rendimiento que antes del incendio que paralizó parte de su actividad a finales de julio
El consejero Catalán visita las instalaciones de la planta de tratamiento.
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La planta de tratamiento de residuos sólidos de La Ribera, ubicada en el paraje “El Culebrete” de Tudela, comenzó su periodo de pruebas y puesta en marcha la semana pasada, tras el incendio que paralizó parte de su actividad a finales de julio, cumpliendo el calendario previsto de reparación.
Con tal motivo, el consejero de Administración Local, Alberto Catalán, el director general de Administración Local, Ángel Serrano, y el presidente de la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera, José María Navarro, entre otros, han visitado las instalaciones que se encuentran, según ha explicado el consejero, a un rendimiento incluso superior al que existía antes del incidente, debido a las mejoras introducidas para su solución. El consejero ha manifestado también su satisfacción por la superación del problema en tiempo record, y la actuación diligente y ágil de la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera y de la propia empresa constructora, Construcciones y Contratas, que se hace cargo del costo del siniestro (en torno a los 600.000 euros).
En estos momentos la planta trata entre 25 y 30 toneladas diarias de residuos, separando y depurando, por un lado la materia orgánica para su procesado y carga en el digestor, y por otro, residuos inertes reciclables como papel, plásticos, latas y briks. La capacidad de la planta permitiría alcanzar las 120 Tn. diarias si fuera necesario. Por otro lado, de los 5.600 m3 de capacidad del digestor se ocuparán unos 5.000, dejando el resto como margen de seguridad.
El principal objetivo de la planta es estabilizar la basura orgánica de acuerdo a la Directiva Comunitaria de Vertederos, de tal manera que los restos que sean vertidos después del tratamiento de biometanización hayan reducido su capacidad contaminante tanto a la atmósfera como al subsuelo. Su puesta en marcha se engloba en el cumplimiento de Navarra con dicha Directiva que exige un tratamiento previo de los residuos antes de ser depositados en los vertederos.
Adicionalmente, dicha Directiva establece que en el año 2009 la cantidad total de residuos urbanos biodegradables destinados a vertedero no superen el 50% de la cantidad total de este mismo tipo de residuos generados en 1995. Unas pautas que Navarra cumplirá escrupulosamente gracias a instalaciones como “El Culebrete” y que dejan fuera de la legalidad, y del respeto al medio ambiente, aquellos vertederos que acojan residuos que no son tratados previamente.
La planta de tratamiento de residuos sólidos de La Ribera está preparada para tratar 50.000 toneladas de residuos al año, permitirá producir 6.000 toneladas de un producto final compostado y generará 5.600 mw/h. de electricidad, descontando su consumo propio.
La capacidad para obtener energía de los residuos orgánicos corre a cargo de un reactor que los trata y les extrae biogás que, a su vez, genera energía eléctrica y evita emisiones de metano a la atmósfera (segundo gas que más contribuye al llamado “efecto invernadero”, después del dióxido de carbono); una energía resultante limpia y renovable totalmente acorde con la filosofía del protocolo de Kyoto.
La inversión necesaria para llevar a cabo el proyecto ha sido de 9.616.193 €, a los que el Fondo de Cohesión Europea ha aportado 3.662.082 €; el Gobierno de Navarra, 4.992.492 € y la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera, 961.619 €.
