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El Gobierno se suma al llamamiento a un consumo responsable de antibióticos de la OMS en el Día Mundial de la Salud jueves, 07 de abril de 2011


La consejera Kutz participa en la celebración de los colegios oficiales de médicos y farmacéuticos de Navarra


El Gobierno se suma al Dia Mundial de la Salud

De izda a dcha: Fortún, García, Ezpeleta, Boneta y consejera Kutz., junto con otros profesionales sanitarios. ( ampliar imagen )

El Gobierno de Navarra se ha sumado hoy al llamamiento realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para un consumo correcto y responsable de los antibióticos, coincidiendo con el Día Mundial de la Salud. La jornada se desarrolla bajo el lema ‘Resistencia a los antimicrobianos: Si no actuamos hoy, no habrá cura mañana’.

La consejera de Salud, María Kutz, ha participado en la celebración promovida con motivo de esta efeméride por los colegios oficiales de médicos y farmacéuticos de la Comunidad Foral. El acto, que ha tenido lugar en la sede del Colegio Oficial de Médicos de Navarra en Pamplona, ha contado con la participación de la presidenta de esta entidad, Maite Fortún, y la del Colegio Oficial de Farmacéuticos, Pilar García, así como del director gerente del Complejo Hospitalario de Navarra, Fernando Boneta, y la jefa del área de Microbiología del CHN, Carmen Ezpeleta. Varios doctores en medicina y farmacia se han sumado a la iniciativa.

Durante su intervención, Ezpeleta ha recordado que “los antibióticos son medicamentos de gran valor y es responsabilidad de todos mantener su eficacia” para curar enfermedades. “La OMS nos recuerda en este Día Mundial de la Salud que todos debemos tomar medidas, tanto profesionales sanitarios como usuarios”, ha explicado.

Ha insistido en la necesidad de promover una “reflexión colectiva” sobre las consecuencias que está teniendo el consumo irresponsable o abusivo de antibióticos, que se está plasmando en una pérdida de eficacia de estos medicamentos, debido a que las bacterias generan resistencias a sus efectos si se hace un uso indebido. A este respecto, ha invitado a la ciudadanía y a los profesionales sanitarios a asumir “una serie de medidas sencillas” para evitar que esto suceda, concretadas en diez recomendaciones.

Diez recomendaciones

En lo que respecta a los pacientes, ha aconsejado que no exijan directamente antibióticos a su médico o pediatra ante unos determinados síntomas, porque son ellos los que deben hacer la correspondiente valoración en cada caso y quienes saben cuándo el enfermo los necesita verdaderamente.

Ha recomendado también no tomar ningún antibiótico sin receta médica, cumplir con exactitud la pauta establecida por el médico en dosis, modo de administrarlo y duración del tratamiento y no guardar restos de antibióticos en su botiquín. “Terminado el tratamiento, recíclelo en su farmacia”, ha aconsejado.

Ha recordado también que no es conveniente que los ciudadanos recomienden un tratamiento antibiótico a conocidos o lo pidan a su farmacéutico, porque “sólo el médico puede recetarlos” y elegir el más adecuado.

En lo que respecta a los profesionales de la sanidad, Ezpeleta ha aconsejado que “antes de prescribir un antibiótico, piensen si es necesario”, porque “no todos los procesos febriles requieren” este tratamiento. “Una infección vírica, o un catarro común no se curarán antes ni evitarán complicaciones por tomar un antibiótico”, ha recordado.

Además, ha explicado que, si finalmente es necesario utilizar un antibiótico, se debe tomar “una muestra para cultivo y antibiograma antes de empezar”, para “poder pautar el tratamiento más adecuado y específico” en cada caso. Mientras se aguarda el resultado, se optará por un tratamiento basado en la experiencia en torno al síndrome infeccioso, las características del paciente y el patrón de resistencias de nuestro medio.

Será cuando se reciba el resultado del análisis del cultivo cuando se ajuste el tratamiento antibiótico de acuerdo a la evolución del paciente y se planteará la posibilidad de utilizar un antibiótico de espectro más reducido que el del tratamiento empírico, lo que se conoce como desescalamiento. Ezpeleta ha insistido en que siempre se tendrán además en cuenta “las características farmacocinéticas y farmacodinámicas del antibiótico para conseguir la máxima eficacia”.

Llamamiento de la OMS

La OMS ha aprovechado la presente edición del Día Mundial de la Salud para promover una campaña de consumo responsable de antibióticos, debido a los preocupantes efectos que está generando la proliferación de microorganismos resistentes a estos medicamentos.

Los antibióticos se han utilizado en los últimos 70 años para tratar las enfermedades infecciosas, lo que ha producido enormes beneficios y salvando millones de vidas. Sin embargo, la resistencia de las bacterias a estos medicamentos está aumentando debido a múltiples factores, entre ellos su uso irresponsable por parte de pacientes que se automedican, abusan de estos medicamentos o hacen un uso indebido (como no culminar los tratamientos una vez iniciados o tomarlos cuando no se necesitan) o su utilización en la alimentación animal, lo que también está contribuyendo en gran medida a la aparición de microorganismos resistentes.

La resistencia bacteriana existe en todo el mundo, no está limitada a los países desarrollados. Se ha comprobado que los pacientes infectados con bacterias resistentes suelen tener estancias más prolongadas y tienen más posibilidades de morir como consecuencia de una infección. Además, cuando el antibiótico no funciona, se requieren tratamientos con fármacos de segunda o tercera línea que pueden ser menos efectivos, más tóxicos, con más efectos secundarios para el paciente y más caros para los sistemas de salud.

La resistencia a los antimicrobianos y su propagación mundial es una amenaza para la continuidad de la eficacia de muchos medicamentos usados hoy día y, además, puede hacer peligrar los grandes avances que se están consiguiendo contra algunas infecciones mortíferas importantes. Hoy por hoy, se considera que la resistencia a los antimicrobianos (RAM) es uno de los problemas de salud pública más graves del mundo. Muchos de los microbios (bacterias, virus, protozoos) que causan enfermedades infecciosas han dejado de responder a los antimicrobianos de uso común (antibacterianos, como los antibióticos, antivíricos y antiprotozoarios).

El problema es tan grave que los expertos consideran que, si no se emprende una acción concertada a escala mundial, se corre el riesgo de regresar a la era pre-antibiótica, época en la que morían muchas personas por causa de enfermedades infecciosas y no era posible practicar intervenciones quirúrgicas mayores debido al riesgo de infección. La aparición de la resistencia a los antimicrobianos es un fenómeno natural, que surge como resultado de la utilización de los antimicrobianos, si bien está cobrando un ritmo acelerado debido a la utilización inapropiada de estos medicamentos.


Nota de prensa:

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Documentación:
Recomendaciones de la OMS
Gobierno de Navarra

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