Castellano | Euskara | Français | English
Compártelo
contacto de esta sección
Atención Ciudadana
Tel.: 948 012012
012*
Horario:
De 8h a 19h de lunes a viernes.
E-mail: navarra@navarra.es
*Coste de la llamada: 0'34 euros independientemente de la duración.
Navarra recibe una medalla de honor de La Carolina por la participación del rey Sancho VII en la batalla de las Navas de Tolosa lunes, 16 de julio de 2012
La vicepresidenta Goicoechea destaca que las cadenas del escudo de Navarra evocan la épica de la batalla contra los almohades de la que se celebra el octavo centenario
La consejera Goicoechea con la medalla de honor de La Carolina otorgada en el VIII centenario de la batalla de las Navas de Tolosa.
(
ampliar imagen
)
La Comunidad Foral de Navarra ha recibido esta mañana una medalla de honor del ayuntamiento de La Carolina (Jaén) en recuerdo de la participación del rey Sancho VII de Navarra en la batalla de las Navas de Tolosa contra el rey almohade Miramamolin al Nasir, que tuvo lugar el 16 de julio de 1212, hoy hace ocho siglos.
En representación de Navarra ha asistido al acto conmemorativo la vicepresidenta primera y consejera de Economía, Hacienda, Industria y Empleo del Gobierno de Navarra, Lourdes Goicoechea, quien ha aludido en su discurso a la historia milenaria de Navarra y a la asociación simbólica de las cadenas de su escudo con las Navas de Tolosa. Como es sabido, una cierta tradición asocia las cadenas que identifican el escudo de la Comunidad Foral con las que protegían el palenque del rey almohade y que el rey navarro tomó al asalto. Esta acción fue decisiva para la victoria del bando cristiano, en opinión de los historiadores.
"Hoy hay quien dice que nuestro escudo es más antiguo que el tiempo en que tuvo lugar la Batalla. Que no son cadenas sino barras de una bloca o refuerzo del escudo lo que allí se representa. Pero sea como sea el origen de nuestro escudo, no cabe duda de que, en un momento determinado, se quisieron unir la historia y su símbolo y desde entonces son las cadenas de las Navas las que representan el pasado histórico y la realidad actual de nuestra Comunidad Foral", en palabras de la vicepresidenta Goicoechea, quien ha calificado el recuerdo que los navarros guardan de las Navas de Tolosa como "un elemento destacado de nuestra historia y de nuestro carácter".
La representante del Gobierno de Navarra ha recordado que "la batalla de las Navas de Tolosa supuso la conjunción de fuerzas de los reinos cristianos de la Península Ibérica, con el patrocinio de la Iglesia, para avanzar en la Reconquista y reducir la dominación musulmana. Una conjunción en la que participó Navarra a través de la acción heroica de su rey Sancho VII el Fuerte y en la que también tuvo importancia decisiva otro navarro sosbresaliente, Rodrigo Ximénez de Rada, arzobispo de Toledo y promotor de la bula de Inocencio III para impulsar la batalla".
El programa de la celebración de las Navas de Tolosa ha tenido un carácter cívico-militar y ha incluído, una misa de campaña, un desfile de la compañía de honores y banda de guerra de la Brigada de Infantería Guzmán el Bueno X, el izado de la bandera, una exhibición aérea a cargo del Batallón de Helicópteros de Ataque I y el acto institucional de imposición de las medallas de honor, que, además de Navarra, han recibido las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha y Aragón, cuyos antiguos reinos medievales también participaron en la batalla, el Ministerio de Defensa y el arzobispo de Jaén.
La Navas de Tolosa y Navarra
A comienzos del siglo XIII, el reino de Navarra atravesaba una coyuntura crítica. Los reinos cristianos del norte de la Península Ibérica estaban inmersos en rencillas continuas y Navarra intentaba salvaguardar su independencia ante sus vecinos, que le habían arrebatado el control de Guipúzcoa, Álava y el Duranguesado. Estas disputas se agravaron con el avance del imperio almohade por el sur. Durante algunos años, Navarra y Aragón buscarían alianzas ocasionales con el Islam para contrarrestar el peso de Castilla, pero las victorias musulmanas acabaron por unir a los cristianos en una cruzada.
Sancho VII de Navarra olvidó sus rencores y decidió participar en la ofensiva junto a las tropas castellanas, aragonesas, portuguesas y cruzados europeos. El 16 de julio de 1212 obtuvieron una contundente victoria sobre los almohades en el campo de las Navas de Tolosa (Jaén), en la que el monarca navarro destacó evitando la retirada del ejército cristiano con un asalto al palenque del califa Miramamolín al-Nasir, que decidió la suerte del combate.
“La Batalla”, como se la denominó en la época, marcó el inicio del declive del poder musulmán en la Península. El éxito de Sancho VII el Fuerte procuró grandes ingresos a la Corona navarra y le permitió consolidar la integridad territorial del reino y recuperar plazas ocupadas por castellanos y aragoneses, como San Vicente de la Sonsierra y Burgui.
Nota de prensa:
Si desea descargarse en formato PDF esta información completa pinche aquí .
